Nos quedan tres días para regresar a la escuela y volver a ver el pizarrón. Las bancas llenas de cuadernos y los compañeros gritando y corriendo por doquier. Los extraño, como extraño los empujones de la tiendita. Extraño los maestros, los administrativos y los directivos. Que irónico, que cuando estoy ahí los odio y cuando estoy acá los extraño, que cuando estoy ahí les digo mamá y cuando estoy acá les digo maestra, que cuando estoy ahí me duermo sobre la banca incomoda y cuando estoy acá en mi cama calientita no puedo dormir. Hay el pizarrón, siento que lo amo, por que lo extraño; todos los días esta ahí para recibirme, se ve tan cálido, tan fuerte y tan sensible que siento que abre los brazos para darme un fuerte abrazo y decirme " buenos días ". Feliz regreso a clases.